Cuando se trata de elegir ventanas o cerramientos, uno de los factores más importantes es el aislamiento térmico. Aquí es donde entra en juego la rotura de puente térmico (RPT), una innovación que marca la diferencia entre una vivienda confortable y otra que pierde energía.

El aluminio convencional es un material conductor. Esto significa que transmite el calor y el frío con facilidad: en invierno deja escapar el calor del interior y en verano permite que entre el calor exterior. Como resultado, se pierde eficiencia energética y aumenta el consumo en climatización.

El aluminio con rotura de puente térmico, en cambio, incorpora una pieza aislante —normalmente de poliamida— que separa la cara interior del perfil de la exterior. Este sistema interrumpe el flujo térmico, reduciendo las pérdidas de energía y evitando la condensación.

Además de mejorar el confort térmico, la RPT contribuye al aislamiento acústico, reduce la aparición de humedad y mejora la eficiencia energética del hogar, lo que se traduce en ahorro en las facturas.

En Aluminios Martín trabajamos con perfiles de aluminio de alta calidad con RPT, adaptados a diferentes tipos de ventanas, puertas y cerramientos. Esta tecnología garantiza durabilidad, estética moderna y un excelente rendimiento frente al clima.

Si estás pensando en renovar tus ventanas, apuesta por el aluminio con rotura de puente térmico: más confort, más ahorro y un hogar más sostenible.